MINNEAPOLIS, MN.-
La vicepresidenta estadounidense y candidata demócrata a la Casa Blanca, Kamala Harris, se acercó este miércoles a las pequeñas empresas con promesas de nuevas exenciones fiscales que incluyen elevar de 5.000 a 50.000 dólares las deducciones a las que se pueden acoger quienes empiezan un emprendimiento.
La rival del exmandatario republicano Donald Trump (2017-2021) habló desde Nuevo Hampshire, un estado tradicionalmente demócrata pero desde donde advirtió que la carrera electoral va a estar reñida hasta el final.
Su plan económico en favor de las start-ups gira en torno a tres ejes: mayores exenciones fiscales, menos burocracia y ayudas económicas que favorezcan su expansión.
Los pequeños negocios, según dijo, están construyendo un futuro mejor para sus empleados y para sus comunidades y, por ende, están erigiendo “una clase media más fuerte y un Estados Unidos más fuerte para todos”.
Harris plantea ampliar de los 5.000 dólares actuales hasta los 50.000 las desgravaciones que se pueden aplicar para ayudar a esas pequeñas compañías a cubrir la media de 40.000 dólares que suele costar empezar un negocio.
La candidata demócrata quiere que haya 25 millones de nuevos negocios beneficiados en los cuatro años de un primer mandato, que comenzaría en enero en caso de vencer a Trump en las urnas en noviembre.
Su programa apuesta también por incentivar a los gobiernos estatales y locales a reducir la burocracia en sus regulaciones y a rebajar las barreras para obtener licencias ocupacionales que dificultan que los trabajadores trabajen en otros estados y que las empresas se expandan.
“Eliminamos barreras a las oportunidades para que cualquiera que desee empezar un negocio pueda tener acceso a las herramientas y los recursos que necesitan. (…) Los pequeños negocios en nuestro país emplean a la mitad de todos los trabajadores del sector privado”, dijo.
Harris impulsó también préstamos sin intereses o con intereses bajos para contribuir al nacimiento de nuevas empresas. Quienes están al frente de los pequeños negocios, dijo, son “mentores, líderes comunitarios y parte del pegamento que une a las comunidades”.
La campaña republicana consideró que esa propuesta no aborda los problemas del país.
“¿Cuál es el plan de Kamala? No hacer nada para abordar la inflación que muchos empresarios dicen que es el mayor problema que afecta a sus operaciones y, en cambio, imponer otro truco costoso y poco claro a los estadounidenses, que solo quieren que las cosas vuelvan a ser asequibles. Kamala lleva 3,5 años en el cargo, ¿por qué no ha hecho eso ya?”, dijo el equipo de Trump en un comunicado.