MINNEAPOLIS, MN
Un huracán y dos tormentas tropicales están girando en el Océano Atlántico y una de las tormentas podría fortalecerse y amenazar las zonas que han sido afectadas por el paso del huracán Irma.
El Centro Nacional de Huracanes (NHC, por sus siglas en Inglés), dijo que la tormenta tropical María se formó el sábado en el oeste del Océano Atlántico y ya es un huracán de categoría 1.
María se encontraba ayer por la mañana a unos 800 kilómetros al sureste de las Antillas Menores, con vientos máximos sostenidos de 120 kilómetros por hora. La tormenta se dirige hacia el Caribe a 25 kilómetros por hora, al norte-noroeste de Barbados.
NHC prevé que el ojo del huracán alcance las islas Leeward en 48 o 72 horas, que llegue el miércoles a Puerto Rico, ya como huracán de categoría 3 y en cinco días a Haití y República Dominicana. María podría impactar zonas que han sido devastadas por Irma el martes o miércoles.
Las islas Guadalupe, Dominica, San Cristóbal, Nevis y Monserrat se encuentran bajo advertencia de huracán. Muchas de las cuales sufrieron los embates del huracán Irma, con casos tan dramáticos como el de Barbuda, devastada en más del 90 por ciento, según las autoridades.
Las islas de Martinica, Antigua y Barbuda, Saba y San Eustacio y Santa Lucía tienen advertencia de tormenta tropical
Ayer por la mañana, el huracán José de categoría 1, se encontraba a 750 kilómetros al sureste de Cabo Hatteras, Carolina del Norte y a 750 kilómetros de Bermuda, con vientos sostenidos de 128 kilómetros por hora y mantendrá su categoría de huracán hasta la noche de hoy, según el NHC.
El avance hacia el norte de José ha motivado la emisión de una alerta de tormenta tropical desde Fenwick Island, en Delaware, hasta Sandy Hook, en Nueva Jersey, en la costa central del atlántico de Estados Unidos. El NHC prevé marejadas y corrientes peligrosa en zonas costeras.
El sábado temprano, también se formó la tormenta tropical Lee al este del Océano Atlántico y se ubica a 1 mil 220 kilómetros al suroeste de Cabo Verde, en el noroeste de África, con vientos máximos sostenidos de 65 kilómetros por hora, de acuerdo con el Centro Nacional de Huracanes, que espera que desaparezca en 5 días.
