MINNEAPOLIS, MN
Pareciera que las condiciones que han llevado a la corporación Target a anunciar el despido de miles de empleados hoy se generaliza entre otras corporaciones en Minnesota. Este, lunes 9 de marzo, General Mills, ha registrado bajas significativas en sus ganancias en el último cuarto fiscal, por lo que la famosa empresa de alimentos ha despedido cerca de 1,500 empleados en los pasados 30 meses. La mitad de ellos son empleados que laboraban en las oficinas y plantas de las Twin Cities. La más reciente ola de despidos tuvo lugar el pasado mes de febrero.
Los movimientos que General Mills ha implementado, son parte del llamado “Proyecto Refuel” que ha sido muy bienvenido por analistas y críticos de la empresa. El proyecto supone un ajuste de la producción de la empresa, a fin de contribuir en los cambios en los hábitos alimenticios de la población en Estados Unidos. Los críticos señalan que éste es un gran paso en la reinvención de la empresa, dejando de lado los típicos paquetes de comida por los que la firma es conocida.
Pero, al mismo tiempo que este cambio toma lugar, la vida de cientos de familias en Minnesota y el resto del mundo, se han visto severamente afectada. Muchos entre quienes laboraban en General Mills se encuentran desesperanzados, por cuanto algunos de ellos laboraron por la empresa por años. Muchos de ellos incluso dudan que los cambios anunciados por la empresa puedan implementarse en corto tiempo.
Una evidencia es que la firma de alimentos sufre ante el surgimiento de competidores, como en el caso del yogurt Chobani. Las diferentes capas bajo las que opera la empresa causan retrasos significativos en la forma y el tiempo de responder a la introducción de nuevos productos por parte de los competidores. “Es por ello que las empresas pequeñas se encuentran ganando sobre General Mills,” dijo un empleado, quién prefirió no revelar su nombre a la prensa en tanto que continúa trabajando en la compañía.
Los despidos que la firma ha puesto en práctica, causan sorpresa debido a la reputación con que contaba al proveer de empleo estable y una carrera de largo plazo para sus empleados. Por ello, líderes de la empresa señalan que los cambios estructurales que se contemplan en el plan mencionado, apunta a generar una mayor capacidad de respuesta a los competidores pequeños, al poder llegar a la toma de decisiones de forma más rápida.
“General Mills ha sido un admirado empleador en esta comunidad por cerca de 150 años, y planeamos serlo por 150 más, pero la restructuración es difícil,” dijo Tom Forsythe, vocero de la compañía. “Es difícil ver que muchos empleados talentosos y comprometidos hayan sido impactados por el cambio, incluso aun cuando la necesidad de cambio es clara.”
Este proceso se desvela en el mismo momento en el que el gobernador Dayton acuerda una reunión con autoridades de Target, a fin de evitar que el efecto de la medida anunciada por la corporación, sea tan grande como se ha estimado. Incluso hoy, lunes, Dayton se reunió finalmente con altos ejecutivos de Target. ¿Acaso tendrá que pactar una reunión hoy con General Mills? El caso es que pese a las voces festivas que anuncian la salida del período de depresión, los despidos continúan tomando lugar, y afectando a muchas familias en Minnesota y el resto del país.