MINNEAPOLIS, MN
Blanca Nieves, la clásica historia de un accidente que llega a rectificarse a lo largo del tiempo, y pese a los esfuerzos por mantenerlo como tal, por parte de la madrastra y las hermanastras, llega a la Compañia de Teatro Infantil (Children’s Theater Company, CTC). Y el título ha logrado atraer la atención de un buen número de personas, y sus hijos, entre quienes se cuentas pequeñas que visten el traje tradicional de Blanca Nieves al atender a la funsión.
Sin embargo, la historia contada por el CTC no es la que todos conocemos; o al menos la forma de contarla no es la misma.
Se trata de lo que podría ser calificado de un monologo a dos voces, con la participación de Dean Holt y de Joy Dolo. Con ésta última, actuando como la Blanca Nieves, su papel parece magnificarse con las extraordinarias participaciones de Holt, quien alterna la representación de los siete enanos, con cada uno de ellos incluso transmutándose en la reina mala, el espejo mágico, y otros personajes.
No se trata, entonces de una propuesta repetitiva de lo conocido, al estilo de Disney. Es un ejercicio actoral de gran demanda, y que por sí mismo constituye un reto significativo, no solo para actrices y actores, sino para espectadores.
Para algunos, quienes esperan el cuento tradicional, la propuesta puede resultar incluso confusa, aun cuando se trata de una adaptación apropiada para todas las edades. Incluso, la idea teatral incluye la participación del público, de entre quien se puede elegir a algunas personas que jueguen un papel a lo largo del espectáculo.
La invitación incluye una fuerte presencia musical, ejecutada por Víctor Zupanc, quien toca el acrodeón, el teclado, las percusiones, y coloca efectos especiales de sonido. Y lo hace desde la altura, en las ramas de un árbol, otorgando una dimensión adicional a la puesta en escena.
Blanca Nieves, corre hasta el 8 de diciembre de este año.
Greg Banks, el director y responsable de la adaptación de la obra, desarrolla un trabajo impresionante, ofreciendo una propuesta fuera de lo convencional, pero que resulta, para quienes han sido testigos, una invitación difícil de rechazar.
No te la pierdas.
Una magnifica oportunidad, como las que regularmente ofrece el CTC, de pasar poco mas de una hora junto a otros espectadores, dispuestos a disfrutar de propuestas diferentes de entender las obras clásicas.
Con base en la clásica historia de los Hermanos Grimm, la adaptación resulta en un ejercicio que motiva a la reflexión, y a la admiración por la capacidad teatral del dueto que la interpreta.
