MINNEAPOLIS, MN
La compra de casa propia ha aumentado a ritmo más rápido entre los hispanos que entre los blancos y afroamericanos en Estados Unidos entre 2014 y 2020, según un informe de la firma de bienes raíces Redfin.
El apoyo familiar y el hecho de que los latinos tienen más probabilidades que otros grupos de obtener asistencia para los pagos son algunos de los factores que han contribuido a que el índice de propiedad de la vivienda haya subido entre los hispanos del 45,4 % en 2014 al 50,1 % en 2020.
Un informe de la Asociación Nacional de Profesionales Hispanos de Bienes Raíces indicó que en 2020 el número de hispanos compradores de casas llegó a 8,8 millones, unos 725.000 más que en el año anterior.
El año pasado fue el sexto consecutivo en el cual la tasa de propiedad de vivienda de los hispanos ha subido.
“Los hispanos en Estados Unidos, especialmente los que son indocumentados, tienden a tener menos acceso al crédito y más deudas que otros grupos raciales o étnicos, lo cual los hace más dependientes del apoyo de sus familias para comprar vivienda”, indico Sebastián Sandoval Olascoaga, un economista de Redfin.
El 52 % de los latinos que han comprado casa han vivido antes o un tiempo con sus familiares o amigos, sin pagar alquiler, comparado con el 29 % de los afroamericanos y el 38 % de los blancos que participaron en la encuesta.
La investigación encontró que los latinos son más propensos que los participantes de otros grupos a haber recibido ayuda directa de sus parientes y otros familiares para pagar el alquiler, el depósito inicial en la compra, o la hipoteca.
“Esa capacidad de contar con la familia es una de varias razones por las cuales la tasa de propiedad de vivienda de los hispanos sigue subiendo de manera sostenida”, según Sandoval.
Redfin señaló en su informe que los hispanos que compran casa también son más propensos que las personas de otros segmentos de la población a hacer esfuerzos financieros a fin de adquirir la vivienda.
El 44 % de los compradores hispanos ha trabajado más horas, el 39 % tiene un segundo empleo y el 38 % sigue conduciendo un automóvil viejo.
“Para muchos hispanos el hacer sacrificios sociales o personales es una necesidad si quieren comprar casa”, comentó Sandoval.
“Esto es especialmente cierto este año cuando los hispanos han estado expuestos más que otros grupos a la pérdida de empleo debida a la pandemia”.