Durante los últimos dos meses, los Vikings acumularon ocho victorias a través de una fórmula de fútbol cuidadosamente construida, que incluía una defensa robusta, una ofensiva eficiente que construía unidades largas y libres de movimiento.
Eso los llevó a un récord de 10-2, y en un empate para el récord máximo de la NFC, antes del partido del domingo con los Carolina Panthers. Y aunque la derrota de 31-24 de los Vikings en el “Bank of America Stadium” podría no haberles costado tanto en términos de posicionamiento en postemporada.
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— Minnesota Vikings (@Vikings) December 10, 2017
La tercera derrota de la temporada de los Vikings el domingo fue obra de una base de errores que los mismos jugadores de Minnesota causaron. Abrieron el juego con una intercepción de Case Keenum, una de las tres veces que el mariscal de campo le dio la pelota a Carolina. Su defensa, que permitió 17 carreras de 10 yardas o más antes del juego, permitió un touchdown de 60 yardas a Jonathan Stewart en la primera serie de los Panthers.
La caída inusual de Rudolph anuló una gran ganancia en el primer cuarto, y Adam Thielen, que solía ser muy seguro, anotó un touchdown en el segundo cuarto, antes de imponerse un pase de doble jugada que más tarde llevó a los oficiales a quitar un touchdown cuando las repeticiones mostraron el balón moviéndose cuando Thielen se fue al suelo. Y en el último cuarto, después de una frenética remontada de los Vikings para borrar un déficit de 11 puntos y empatar el marcador 24-24, el mariscal de campo de los Panthers Cam Newton corrió 62 yardas en un juego de lectura de zona, más allá de un tackle errado de Andrew Sendejo, para establecer TD ganador de Stewart.
“Crédito Carolina”, dijo el entrenador de los Vikings, Mike Zimmer. “No jugamos lo suficientemente bien como para ganar. Dimos vuelta al balón y perdimos grandes carreras en defensa. Les doy crédito y volveremos a trabajar”.
La derrota puso fin a la racha de ocho victorias de los Vikings, y pusieron su apuesta para asegurar la NFC Norte en espera durante una semana, luego de que las victorias de los Detroit Lions y los Green Bay Packers movieran a esos equipos a 7-6.
También los puso a un juego detrás de los Philadelphia Eagles en la carrera por el primer lugar de la NFC, y significó que los Vikings no pueden ganar un desempate de oponentes comunes contra los Eagles (aunque Filadelfia podría haber perdido al mariscal Carson Wentz en una rodilla que pone fin a la temporada lesión contra los Rams el domingo).
