MINNEAPOLIS, MN
Hace dos años hable en un programa de la Universidad de St. Kate’s a un grupo de mujeres profesionales Latinas de Minnesota. Habían como quince mujeres profesionales en el grupo y me impresionó el alto nivel de educación de ellas y la variedad de carreras representadas en la clase. La pasamos bien alegre en el seminario y llegue a mi casa entusiasmada con todas mis nuevas conexiones y nuevas amigas Latinas. Le dije a mi esposo, “Existen más mujeres como yo aquí mismo en Minnesota!”
Cuando dije esas palabras realice cuanto apoyo me ha faltado a mí por haber estado sola en el mundo corporativo de América, navegando las posiciones ejecutivas y las juntas directivas sola y sin ayuda. Sabemos que hay soledad cuando uno es una mujer ejecutiva profesional. Siendo Latina es aún más difícil y la soledad es más pronunciada—por lo menos esa ha sido mi experiencia personal aquí en Minnesota.
Tengo que admitir que no me he involucrado mucho en la comunidad Latina de Minnesota desde que vine hace treinta años. La mayor razón es porque quería ser parte de “la mescolanza” y no ser vista como una persona diferente. Pero la verdad es—Yo soy diferente. Soy única. Vine aquí con mis valores, morales, y mi propia cultura, lo cual es una combinación de mi país de origen, Nicaragua, y de la Republica Dominicana, donde viví casi siete años como refugiada después de la revolución de Nicaragua en 1979.
Sí, soy diferente y única, lo cual es precisamente lo que me hace ser “yo.” Y eso me encanta! Soy una mujer Latina profesional. Al mismo tiempo, no soy diferente de otros profesionales—hombres o mujeres—cuando se considera lo que es ser un profesional.
Uno de los temas que yo presento a audiencias profesionales es basada en el libro de James Ball, Professionalism is for Everyone (El Profesionalismo es para Todos). Ball comparte cinco claves características que diferencian a los profesionales: carácter, actitud, excelencia, competencia, y conducta. Lo importante es notar que no importa de dónde eres o si eres hombre o mujer, lo que importa es si te conduces como un profesional—consistentemente. Pero, ¿es eso suficiente para triunfar?
Existen tres obstáculos (o retos) importantes que las mujeres profesionales Latinas encuentran aquí en los Estados Unidos:
- El primer reto es el lenguaje – Dependiendo de cuando llegaste a los Estados Unidos, tendrás un acento fuerte, lo cual hace el comunicarse difícil. Puedes mejorar o perfeccionar tu pronunciación solo practicando más pero también, al final, debes de aceptar tu acento y apreciarlo. Es un punto de conversación adonde quiera que vayas! Pero, definitivamente, tienes que dominar el idioma Ingles y saberlo bien.
- El segundo obstáculo es que aquí te consideran una “persona de color.” No importa de dónde eres, si tu descendencia no viene del nórtico, aquí en Minnesota, eres considerada “de piel oscura” e “Hispana.” Tuve que aprender a aceptar ese concepto aunque yo soy de piel blanca y hasta tengo pecas cuando salgo al sol, aquí en Minnesota, soy oscura. No me importa!
- El tercer obstáculo es que eres mujer. Las mujeres en todo el país de Estados Unidos están todavía enfrentando el mismo obstáculo de la diferencia de paga por los mismos trabajos hechos por hombres, no ser promovidas, o simplemente no pertenecer al “club de los caballeros” lo cual significa el lugar donde solo hombres pueden entrar.
Entonces, con estas circunstancias, ¿que piensas hacer acerca de estos retos u obstáculos? Que puedes hacer al respecto?
Aquí es como puedes ayudarte a ti misma y a otras que viene detrás de ti:
- Encuentra a otras Latinas! Ya después que se encuentren, manténganse conectadas.
- Conecta a otras Latinas con personas que conoces que puedan presentarlas a gente que les puedan dar oportunidades en el futuro.
- Ofrece tutoría a otras Latinas menores de edad y enséñales lo que has aprendido para navegar el mundo de negocios.
- Patrocina a alguien. Patrocinar a alguien es más allá de una presentación. Arriesgas tu reputación por esa persona para que ellas tengan una mejor oportunidad de obtener una promoción o un trabajo específico.
- Continúa tu propia educación. Obtiene tus credenciales para que puedas competir por las posiciones de liderazgo más altas.
Alégrate y acepta ser una mujer Latina profesional. Eres única y eres especial. Tus contribuciones se necesitan aquí mismo en Minnesota así como en el resto del país.