El Minnesota de Hoy

Noticias Minnesota News

53°F

MEXICANAS SIN FRONTERAS – LA VIDA DESPUÉS DEL CRUCE

Mexicanas sin fronteras – la vida después del cruce

MINNEAPOLIS, MN. Por Ángel David Torres*

Del enorme flujo de migrantes internacionales que durante las al menos tres últimas décadas ha arrojado la llamada “globalización”, que prometía menos pobreza y más desarrollo, sobresale hoy mismo el segmento de las mujeres.

Tradicionalmente estudiado desde la perspectiva masculina, el fenómeno migratorio ha adquirido en gran medida un cada vez más visible rostro femenino en todo el planeta.          

Datos de las Naciones Unidas, por ejemplo, indican que el 48% de la población migrante total, que ubicaba a finales de la segunda década de este siglo en 272 millones, corresponde precisamente a mujeres que han dejado sus países de origen por razones varias, sobresaliendo la pobreza, por supuesto, pero también debido a la violencia de género, discriminación, acoso, conflictos bélicos, desastres naturales, o bien por el deseo legítimo de dar a sus vidas y las de sus familias un nuevo rumbo desde el ámbito empresarial o profesional.

      

Las 14 entrevistas a mujeres originarias de México que integran el libro La vida después del cruce. Historias de migrantes mexicanas que vencieron la adversidad para triunfar en Estados Unidos, de la periodista mexicana María Luisa Arredondo, dan cuenta precisamente de esa feminización del fenómeno migratorio, en especial en un país como Estados Unidos.

Y ya sean empresarias, académicas, luchadoras sociales, políticas o promotoras culturales, las voces que cuentan aquí su experiencia —nacidas en la segunda mitad del siglo XX y ejerciendo con toda plenitud sus disciplinas en lo que va de esta nueva centuria— comparten al mismo tiempo el aspecto más significativo en la vida de todo migrante: demostrar que son un valiosísimo aporte a la nación que han adoptado como nuevo hogar, a pesar de la intensa retórica antiinmigrante, xenófoba y discriminatoria que pretende minimizar o incluso desaparecer su presencia.

Según cálculos del Consejo Nacional de Población (Conapo), de México, citados por la autora en su libro —migrante ella misma—, son ya 5.5 millones las mexicanas que han decidido dejar su país, casi en la misma proporción que sus pares masculinos, desde principios del siglo XXI. Este dato es en extremo relevante, toda vez que ayuda a visibilizar con cifras concretas el protagonismo de la mujer mexicana en las nuevas cadenas migratorias, lo que al mismo tiempo repercute directamente en la economía de origen y en la de destino.

Dice la también ex-editora del diario La Opinión, de Los Ángeles, que, según datos de la Oficina del Censo, “el 44% de todos los negocios latinos en Estados Unidos pertenece a las mujeres de este grupo étnico”, cuya mayoría es concretamente de origen mexicano. Añade quien también fuera reportera del periódico angelino, que esto quiere decir que “cerca de 1.5 millones de empresas que generan 78,700 millones de dólares en ventas operan bajo la dirección de empresarias latinas”. Y remata: “Hay 28 millones de latinas en el país que representan el 17% de las mujeres y el 9% de toda la población”.

Ana Valdez, especialista en mercadotecnia y entrevistada por Arredondo para La vida después del cruce, lo dice de una manera más contundente: “Si la comunidad latina fuera una nación independiente, ocuparía el quinto lugar dentro de las economías más grandes del mundo, sólo después de Estados Unidos, China, Japón y Alemania”.

Llegar a esa conclusión ha significado todo un camino lleno de obstáculos, pruebas y despropósitos como lo relatan con sus propias palabras las protagonistas del libro de la también directora del portal Latinocalifornia.com, desde violencia y dolorosas separaciones familiares, hasta cambios radicales en sus disciplinas profesionales. Pero todo ello con un denominador común que retrata de manera brillante la autora de La vida después del cruce: fortaleza absoluta para dejar de manifiesto que empezar muchas veces de cero no es el fin del mundo y que, en todo caso, ser migrante y ser mujer es una combinación que enriquece a las naciones de destino exponencialmente.

En efecto, como apuntan las investigadoras Martha Judith Sánchez Gómez e Inmaculada Serra Yoldi en la obra Ellas se van. Mujeres migrantes en Estados Unidos y España (México, UNAM, 2013), “en las últimas décadas se ha producido un consenso no sólo sobre la necesidad de visibilizar la presencia de las mujeres, sino de introducir la perspectiva de género para avanzar en una comprensión más integral del fenómeno migratorio. De ser un tema marginal que apenas suscitaba producción científica, dicho objeto de estudio ha ido ganando cada vez mayor protagonismo”.

Inscrito en la tradición de textos que abordan de lleno el tema migratorio, La vida después del cruce se suma a las obras de investigación precisamente con perspectiva de género que en este caso responde a múltiples preguntas —sobre todo la de cómo reinventarse una vez que se está en territorio extraño—, pero en especial para reivindicar derechos y forjar una poderosa identidad en este que se ha denominado ya el siglo de las mujeres.

*Ángel David Torres es un periodista independiente con enfoque en información general e inmigración. Blog: Transcribo (https://transcribo1.blogspot.com/)

 



MÁS NOTICIAS DE INTERÉS EN EL MINNESOTA DE HOY