MINNEAPOLIS, MN
En una noticia que recorrió las redes sociales con rapidez, por la mañana de este Jueves 23 de Junio, la Suprema Corte de Justicia de los Estados Unidos anunció un empate 4-4 en la decisión en un caso que cuestiona el plan del presidente Barack Obama para extender un mecanismo de protección legal y temporal a cerca de 5 millones de inmigrantes no autorizados, evitando que fuesen deportados, y otorgándoles las condiciones para que puedan trabajar legalmente en los Estados Unidos. La extensión de DACA y DAPA quedan así en suspenso, luego de que la suprema corte no lograra decidir.
Se esperaba que esta fuese el más importante de los legados del presidente aun en funciones, y sin embargo ha quedado en manos de un a corte de apelaciones la decisión final sobre el ambicioso plan del presidente.
Quienes podrían haber sido beneficiados por la introducción de la extensión del DACA y la introducción de una nueva iniciativa DAPA, cuentan por cerca de la mitad de los 11 millones de indocumentados que hoy viven y trabajan en el país de acuerdo con múltiples estimaciones. Los programas que apuntan a beneficiar a padres de quienes hayan sido beneficiados por el DACA de 2012, o bien de hijos que hayan nacido en el país, pero que sean ellos mismos indocumentado, en tanto que la extensión DACA buscaría beneficiar a un número mayor de personas bajo el formato original, pero extendido. Es decir con la inclusión a la protección de personas que hayan sido traídos al país antes de enero del 2010.
La mayor cantidad de quienes se favorecerían por esas medidas radican en estados como California, Texas, Illinois, Nueva York, Florida. Los gobiernos de Texas y de Florida s encuentran entre los 26 que interpusieron la demanda contra la medida de Obama. En dicha demanda, se acusa al presidente de ignorar los procedimientos federales para cambiar reglas y de haber abusado de su autoridad desde la oficina presidencial, al ignorar al congreso antes de implementar esa medida.
La acción ejecutiva del presidente buscaba reconocer las contribuciones de esos residentes que han hecho en sus comunidades locales y sobre todo en el plano económico, además de mantener unidas a las familias que consideran en su mayoría los Estados Unidos como su hogar. Al mismo tiempo, la medida podría impulsar las economías locales y nacionales al fortalecer la fuerza laboral del país, al tiempo que la gente joven entre ellos podrían alcanzar mejores niveles educativos y por tanto podrían competir por mejores salarios con mejores empleos.
Minnesota
En términos aproximados, se estima que una completa implementación de las iniciativas DAPA y extensión de DACA podría traducirse, en el caso del estado de Minnesota tan solo, en una mejora de la economía en montos equivalentes a $1,700 millones de dólares en un plazo de 10 años. Un monto significativo si se considera que la proporción de migrantes indocumentados en el estado es significativamente menor a lo que en los principales estados.
De acuerdo con estimaciones de población, alrededor de un tercio de los estimados 90,000 indocumentados viviendo en Minnesota calificarían para el programa DAPA o la extensión DACA. Para líderes comunitarios, el resultado de la suprema corte significa la necesidad de implementar nuevas estrategias, especialmente en torno a impulsar el voto de quienes estarán autorizados para hacerlo, y establecer un nuevo equilibrio en el congreso.