MINNEAPOLIS, MN
Largos tiempos de transporte pueden afectar la salud y el estado de ánimo
En un par de estudios recientes publicados por el reportero Joseph Stromberg, en la revista científica Vox, el reportero explica por qué largos tiempos de transporte en auto, puede
n ser horribles para la salud de los individuos. Al mismo tiempo, Stromberg explica el por qué el usar la bicicleta o caminar, puede hacer de las personas más felices y más saludables. A fin de lograr establecer estas premisas, el escritor usa sus propias investigaciones aun cuando, dice él, en algunos casos de trata de estudios observacionales.
Uno de los mayores problemas que se pueden argumentar hoy, es que aun cuando llegamos a saber cómo nuestra forma de transporte al trabajo y de vuelta puede ser cambiada, y acaso podamos enterrar las costumbres que más dañan a la salud, pocas personas han prestado atención al fenómeno.
“Muchos americanos están obsesionados con enterrar esas cosas que nos hacen no saludables – incluso hasta puntos excesivos,” escribe Stromberg. “Nos desintoxicamos, dejamos de consumir gluten, nos sometemos a cada vez más complejos regímenes de ejercicio (incluso aun cuando esos son innecesarios). Y aun así, por alguna extraña razón, pareciera que no tenemos ninguna dificultad en hacer una actividad simple incluso cada fin de semana, que está asociado con la presencia de obesidad, alta presión arterial, falta de sueño, y en general con la falta de felicidad. Esa actividad es el conmutar – o al menos el conmutar como conductores solitarios en automóviles.”
Según reporta Stromberg, un estudio encontró que la gente que tiene los tiempos de conmutar más largos en sus autos (con más de 20 millas al día) tienden a tener una mayor presión arterial y mayores niveles de azúcar en la sangre, en comparación con aquellos que tienen la menores distancias de conmutar (menos de 5 millas al día).
Esos efectos se diluyen cuando los autores del estudio corrigen a partir de la introducción de los hábitos de práctica de ejercicios. Aun así, subraya Stromberg, la triste realidad es que la mayoría de la gente parece perder su interés por practicar ejercicios luego de estar sentado por largos período
s de tiempo en tráficos interminables mientras conducen a casa.
Otro estudio, también mencionado en la revista Vox, señala que la gente que pasa mayor tiempo en trasportarse de un lugar a otro, pasan menos tiempo practicando ejercicio, durmiendo, y cocinando en casa. También son estas personas las que tienden a comprar mayor cantidad de comida para llevar a casa, o bien consumiendo comida rápida (fast food).
E incluso si estas personas llegan a encontrar un tiempo para ejercitarse, la gente con los mayores tiempos de conmutación tienden a presentan mayores niveles de presión arterial que aquellos que cuentan con menores tiempos de transporte en sus automóviles, de la misma forma en que registran mayores casos de dolor de espalda o cuello.
Los largos tiempos de transporte también están asociados con mayores niveles de estrés crónico, y con problemas de sueño. No es de sorprender, entonces que las encuestas desarrolladas, tanto en los Estados Unidos como en el extranjero, se haya encontrado que la gente que pasa mayor tiempo conduciendo sus autos “reportan mayor cantidad de tiempo preocupándose, sintiéndose menos descansados, y experimentan menor gozo por la vida,” dijo el mismo Stromberg.
