ROSEVILLE, Minnesota
La División Norte del Ejército de Salvación está enviando dos trabajadores experimentados en desastres a Florida para servir como parte de un equipo de respuesta a emergencias de huracanes, trabajando para brindar alivio a las víctimas afectadas por el huracán Helene, así como para apoyar a los socorristas y trabajadores de rescate allí.
Entre las personas que se desplegarán se encuentran Dorothy Maples, directora de Servicios de Emergencia para Desastres del Ejército de Salvación de Twin Cities, y la teniente Amanda Hines, administradora del centro de servicio del Ejército de Salvación en Maplewood. Partirán hoy y, al menos durante las próximas dos semanas, formarán parte de un equipo de respuesta que coordinará las tareas de socorro en Live Oak, Florida, en una zona devastada por el huracán.
Maples y Hines formarán parte de un equipo de operaciones en el norte de Florida, centrado en brindar atención emocional y espiritual (ESC) a las víctimas, las familias, los socorristas y los trabajadores de rescate. Su trabajo es fundamental para ayudar a los afectados a procesar y afrontar lo que han pasado, ya sean víctimas de la tormenta o trabajadores de socorro que se enfrentan al trauma que están atravesando.
La respuesta nacional al desastre del Ejército de Salvación actualmente involucra a ocho equipos de comando separados que trabajan en las áreas afectadas en Florida, Georgia, Tennessee y Carolina del Norte. Esta operación ampliada tiene como objetivo ayudar a satisfacer las necesidades inmediatas mediante alimentación, refugio y atención emocional y espiritual para los sobrevivientes y los socorristas, ya que los cortes de energía generalizados y las inundaciones continúan afectando vastas áreas del sureste de los Estados Unidos.
El Ejército de Salvación ya ha trasladado docenas de vehículos de alimentación móviles a las zonas afectadas, cada uno de ellos capaz de proporcionar hasta 1.500 comidas calientes al día.
Jeff Jellets, coordinador territorial de desastres del Territorio Sur del Ejército de Salvación, habló sobre la magnitud del impacto de Helene. “Este huracán tuvo más de 500 millas de diámetro y afectó a ocho estados dentro de nuestro territorio. En mis más de 20 años de experiencia en desastres, no puedo pensar en un momento en el que una zona tan grande estuviera en riesgo, o en el que se pudiera recurrir al Ejército de Salvación para ayudar a tanta gente”.
Se espera que la respuesta de emergencia al huracán dure varios meses y que se desplieguen nuevos equipos para relevar a los equipos existentes.
Hay dos formas en las que las personas pueden ofrecer apoyo financiero para el esfuerzo de socorro del Ejército de Salvación tras el huracán Helene:
- Visita give.helpsalvationarmy.org
- Llama al 1-800-SAL-ARMY (1-800-725-2769)
- El cien por ciento de las donaciones se destinará a apoyar las víctimas del huracán Helene.
Es posible que estén disponibles entrevistas con Maples o Hines, dependiendo de su capacidad para mantener las comunicaciones por Internet y celular.
