MINNEAPOLIS, MN
Un senador estadounidense pidió al gobierno federal investigar un programa que obtuvo millones de registros de remitentes y destinatarios de remesas hacia y desde México de empresas como Western Union para hacerlas disponibles a las policías locales y federales.
Según el senador Ron Wyden, quien preside el Comité de Finanzas en el Senado, el Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE, en inglés) obtuvo la información financiera de millones de personas bajo esa iniciativa.
En una carta enviada al Departamento de Seguridad Nacional (DHS, en inglés), el demócrata pidió una investigación de esa práctica.
Según Wyden ICE cosechó los registros de las transferencias de dinero por más de 500 dólares desde y hacia a México, y de transferencias dentro y fuera del país por más de 500 dólares desde Arizona, California, Nuevo México y Texas.
El personal legislativo de Wyden se puso en contacto en enero con el DHS inquiriendo sobre el programa y la respuesta dada en febrero fue la primera vez que alguien en el Congreso recibió información sobre este asunto.
En la carta, citada por varios medios estadounidenses, Wyden señaló que investigadores del DHS indicaron que habían usado un tipo de citación administrativa para obtener unos seis millones de registros de transacciones financieras.
El gobierno solicitó los datos de seis meses de Western Union y Maxitransfers Corporation, y la información incluye los nombres y direcciones de los remitentes y destinatarios de esas transacciones.
DHS indicó a las compañías que enviaran la información a una organización llamada Transaction Record Analysis Center (TRAC) que facilita el acceso de las policías locales, estatales y federales a los datos a granel.
Las agencias policiales con acceso a esos bancos de datas pueden usar la información “sin algún tipo de vigilancia de los tribunales”, señaló Wyden en su carta, según el portal noticioso BuzzFeed.
ICE puso fin a la práctica después de la consulta de la oficina de Wyden, indicó ese medio.
La oficina del senador Wyden no respondió a las consultas sobre la carta.
Según el diario The Wall Street Journal no se ha determinado exactamente en qué forma las autoridades han usado esa información que, al parecer, involucra solo los servicios de transferencia de dinero más que los bancos.
Esos servicios son usados con frecuencia por los inmigrantes que no tienen cuentas bancarias y envían dinero a sus familias en sus países de origen.
Los orígenes del programa datan de, al menos, 2010 cuando la Fiscalía General de Arizona empezó a cosechar datos similares de Western Union tras la resolución extrajudicial de un caso sobre lavado de dinero, indicó la carta del senador.