MINNEAPOLIS, MN
Aproximadamente 37 millones de adultos en Estados Unidos tienen degeneración macular, cataratas, retinopatía diabética o glaucoma relacionados con la edad, los cuales pueden provocar deterioro visual o ceguera, según el Instituto Nacional de Ojos. Sin embargo, estudios recientes indican que hacer elecciones saludables y hacerse controles oculares regulares puede ayudar a reducir el riesgo de pérdida de la visión de la persona. En respaldo del Mes de la vista saludable del NEI en mayo, la Academia Estadounidense de Oftalmología (American Academy of Ophthalmology) alienta a que todo el mundo se haga cargo de su salud ocular y preserve su vista siguiendo algunos consejos sencillos.
Tenga un estilo de vida sano. Ingerir una dieta nutritiva, mantener un peso saludable y no fumar puede reducir su riesgo de enfermedades oculares. Entre los alimentos que refuerzan la salud ocular se incluyen las hojas verdes, el pescado de agua fría y los cítricos. Un estudio reciente publicado en la revista Ophthalmology indicó que una dieta rica en vitamina C puede recortar el riesgo de avance de las cataratas en casi un tercio.[2] Otras investigaciones indican que fumar duplica el riesgo de degeneración macular relacionada con la edad, está vinculado a las cataratas y empeora el ojo seco.
Conozca sus antecedentes familiares. Ciertas enfermedades oculares pueden ser hereditarias. SI usted tiene algún pariente cercano con degeneración macular, tiene un 50 por ciento de probabilidades de desarrollar la afección. Además, los antecedentes familiares de glaucoma aumentan sus probabilidades de desarrollar la enfermedad de cuatro a nueve veces. Así que pregunte a sus familiares qué enfermedades oculares sufren. Puede ayudarle a usted y a sus profesionales oftalmológicos a evaluar si usted puede correr un riesgo mayor.
Hágase un examen de fondo de ojo. Muchas enfermedades oculares pueden no presentar síntomas en las etapas tempranas. Un estudio de fondo de ojo es la mejor forma de detectar enfermedades oculares de modo que puedan ser tratadas lo más pronto posible a fin de evitar la pérdida de visión. La Academia recomienda que los adultos se hagan un examen inicial integral de los ojos con un oftalmólogo – médico que se especializa en la atención médica y quirúrgica de los ojos – al llegar a los 40. Este es el momento en que comienzan a producirse los cambios oculares relacionados con la edad.
Use gafas de sol. Con el tiempo, la exposición a los rayos UV del sol puede aumentar su riesgo de cataratas, ciertos cánceres, y crecimientos en o alrededor de los ojos. Al elegir gafas de sol, elija unas que bloqueen como mínimo el 99 por ciento de los rayos UV. Un sombrero de ala ancha también ofrece una gran protección adicional.
Use gafas de protección para evitar lesiones. A grandes rasgos, un tercio de todas las visitas a sala de emergencias por problemas relacionados con los ojos derivan de lesiones oculares traumáticas, según un estudio reciente en la revista Ophthalmology.[3] Para ayudar a prevenir estas lesiones, use gafas protectoras adecuadas al realizar actividades que podrían provocar lesiones oculares, tales como reparaciones hogareñas, trabajos de jardinería y deportes.
“La gente a menudo no se da cuenta que acciones simples y cotidianas pueden ayudarles a preservar su visión hasta bien entrados sus años de ancianidad”, comentó la doctora Rebecca J. Taylor, vocera clínica de la Academia Americana de Oftalmología. “Recomendamos que todo el mundo tome estas medidas para mantener sanos sus ojos”.
Para conocer más formas de mantener sus ojos sanos, visite el sitio web de información pública de la Academia Americana de Oftalmología, en www.aao.org/eye-health.