MINNEAPOLIS, MN
Como madre, usted hace todo lo posible para mantener a su niño sano.
Mantener a su niño sano empieza antes del nacimiento, al dar los pasos necesarios para tener un embarazo saludable. Toma vitaminas, evita las cosas que pueden hacerle daño a su bebé no nacido, hace ejercicio físico regularmente y descansa. Vacunarse contra la tos ferina o tos convulsiva (llamada Tdap) es también importante para tener un embarazo saludable.
Las mujeres embarazadas deben recibir la vacuna contra la tos ferina durante cada embarazo. Cuando se vacuna, su cuerpo crea una protección contra la enfermedad. Si se vacuna mientras está embarazada, puede pasar la protección a su bebé. Los recién nacidos necesitan esta protección de sus madres ya que todavía no tienen la edad suficiente para recibir sus propias vacunas. La vacuna es segura y no presenta riesgo si se administra durante el embarazo. Las mujeres deben vacunarse tan pronto se lo recomiende su médico para asegurar que le pasa protección suficiente al bebé antes de nacer.
La tos ferina (también llamada pertussis) es una enfermedad pulmonar que provoca violentos ataques de tos que se repiten durante semanas o meses. Esta enfermedad es común y se propaga fácilmente a través de la tos y los estornudos. La tos ferina puede enfermar gravemente a los bebés, e incluso puede ser mortal. Cuando los bebés pequeños contraen la tos ferina pueden dejar de respirar o toser con tal fuerza que se ponen azules o vomitan. Los bebés pueden permanecer en el hospital por un largo tiempo si tienen dificultad para respirar por los síntomas de la tos ferina.
Vacunarse contra la tos ferina durante el embarazo es la mejor manera de proteger a los recién nacidos de contraer esta peligrosa enfermedad. La protección de la vacuna contra la tos ferina que un recién nacido recibe directamente de su madre no dura mucho tiempo. Por esta razón, es importante que a los bebés se les administren sus propias vacunas para que sus cuerpos puedan crear su propia protección. Las vacunas contra la tos ferina (llamada DTaP) se recomiendan para bebés a partir de los 2 meses de edad, una vez que la protección de su madre desaparece.
Si está embarazada, pregunte a su médico acerca de las vacunas que necesita para mantener su salud y la de su bebé.
La vacuna contra la tos ferina, junto con otras vacunas recomendadas, deben estar cubiertas por los seguros de salud e incluidas en su cuidado prenatal. Llame al número en el reverso de su tarjeta de seguro para averiguar el costo de la vacuna. Los adultos no asegurados, y aquellos adultos cuyo seguro no cubre las vacunas, pueden recibirlas a bajo costo en una clínica registrada en el programa de vacunas para adultos con seguro limitado o no asegurados.
Visite las Clínicas de vacunación para adultos con seguro limitado o no asegurados: www.health.state.mn.us/uuavsearch.
Conozca más sobre la importancia de la vacuna contra la tos ferina aquí: www.cdc.gov/pertussis/pregnant/mom/index.html