MINNEAPOLIS, MN. Por Héctor Benítez Cañas
La Convención del Partido Republicano marcó la nominación oficial de Donald Trump como candidato, y el nombramiento de su vicepresidente, JD Vance. Mientras Trump hace campaña para la reelección, su mandato anterior ofrece una visión previa de lo que podría priorizar, particularmente en lo que respecta a las visas de inmigrantes familiares y la unificación familiar.
La primera presidencia de Trump estuvo marcada por cambios significativos en la política de inmigración de Estados Unidos. Su administración implementó políticas que afectaron significativamente las visas de inmigrantes familiares y la unificación familiar. Uno de los cambios más impactantes fue la ampliación de la regla de carga pública.
Además, introdujo procesos de investigación más rigurosos para los solicitantes de visas, incluidas entrevistas obligatorias y un escrutinio adicional de los documentos financieros. Estas medidas llevaron a tiempos de procesamiento más largos y mayores períodos de espera para la reunificación familiar, lo que a menudo resultó en una mayor probabilidad de denegación de visas.
De cara a una posible presidencia de Trump en 2024, es probable que se restablezcan y se intensifiquen las políticas de inmigración restrictivas. La reimplementación de la regla de carga pública es un paso probable, que dificultaría la inmigración de familias de bajos ingresos, al descalificar a muchos solicitantes en función de su situación financiera y el uso potencial de beneficios públicos.
Se pueden esperar más restricciones, incluidos requisitos financieros más estrictos para los patrocinadores y definiciones más estrechas de los miembros elegibles de la familia. La administración podría buscar cambios legislativos para solidificar estas restricciones, complicando aún más el proceso.
Es probable que continúe un mayor escrutinio y procesos de investigación integrales para los solicitantes de visas, lo que resultará en tiempos de espera más largos y denegaciones más frecuentes de visas familiares.
En el clima actual, USCIS ha declarado que prioriza el procesamiento de solicitudes de naturalización (N-400) y solicitudes de ajuste de estatus (I-485). Recientemente, USCIS recordó su compromiso con la unidad y la estabilidad familiar, destacando un nuevo proceso de libertad condicional. Este permite que ciertos cónyuges e hijos no ciudadanos de ciudadanos estadounidenses, que han estado presentes irregularmente en EEUU durante al menos una década, soliciten la residencia permanente legal sin salir del país.
Es importante señalar que estas políticas discrecionales pueden estar sujetas a cambios con una nueva administración, y no hay certeza de que continuarán o se ampliarán. Dado el potencial de cambios futuros, es crucial que las personas busquen los beneficios de inmigración aplicables, mientras estén disponibles actualmente.
* Héctor Benítez Cañas es abogado de inmigración en Miami. Su firma Benme Legal se dedica a la práctica exclusiva de la Ley de Inmigración. https://www.benmelegal.org/