MINNEAPOLIS, MN
La decisión tomada por el Presidente Barack Obama en el sentido de generar mecanismos de alivio temporal al riesgo de ser deportado si se es un inmigrante indocumentado en el país ha generado muy diversas reacciones. Desde el total rechazo a la medida, mayormente por parte de los críticos a las iniciativas presidenciales, pasando por el júbilo, la cautela y el descontento. Algunos argumentos expresados han resaltado que la medida es parcial, que no benéfica a todos por igual, y que en muchos aspectos, es una acción que busca beneficiar a quienes no se habían favorecido por la Acción Diferida.
Un reporte muy reciente de la organización PEW Research, presenta un análisis muy interesante sobre cómo se distribuirán los grupos poblacionales que serán beneficiados a partir del momento en el que la acción ejecutiva tome forma y se implemente. En el reporte se resalta que “en tanto la acción ejecutiva del Presidente Obama, expandiendo el alivio temporal de deportación a cerca de la mitad del total de la población de inmigrantes indocumentados provenientes de países del mundo entero, quienes han nacido en México sentirán el mayor impacto bajo las nuevas reglas, seguidos de quienes provienen de Centroamérica.”
En las estimaciones presentadas, serían cerca de 5.35 millones de personas quienes podrían beneficiarse de la medida, incluyendo a quienes se encuentran ya protegidos bajo el DACA. Así, 3.85 millones de personas entrarían en el grupo de nuevos beneficiarios. El mayor grupo de quienes suman parte de quienes resultarían favorecidos, está entre quienes son originarios de México, sumando hasta 2.6 millones de personas en todo el país, seguidos de 425 mil de quienes han migrado de Centroamérica, 180 mil de Suramérica y 110 del Caribe. De entre quienes han venido de algún país asiático, se podrán beneficiar hasta 375 mil, 120 mil de Europa y Canadá, y tan sólo 75 mil inmigrantes del Este oriental, África u otra región.
El reporte resalta que “la Acción de Obama ha sido particularmente importante para los inmigrantes no autorizados provenientes de México: en tanto sólo el 11% de los inmigrantes mexicanos indocumentados fueron elegibles previamente para el alivio en el proceso de deportación bajo el programa de Acción Diferida para Hijos de Inmigrantes (DADA) o bien el de Status de Protección Temporal (TPS), el anuncio hecho incrementará la proporción en cinco veces.”
Para muchos, este anuncio busca responder al descontento que el DACA provocó entre amplios sectores de inmigrantes mexicanos, quienes por cierto representan la mayor proporción de inmigrantes a los Estados Unidos. Una deuda que probablemente se oriente a atraer el apoyo de una mayoría de nuevos votantes, hijos de mexicanos, que participarán en la selección de quien ocupará la silla presidencial en dos años. La medida tendrá vigencia por tres años, por cierto. Es por ello que algunas personas buscan puntualizar que el verdadero objetivo de Obama es el asegurar que la votación favorezca a los demócratas en el próximo ejercicio electoral. Y es seguro que muchos de aquellos que se verán favorecidos, promoverán el apoyo que Obama busca, tan sólo por el hecho de evitar un riesgo mayor de deportación si llega a la presidencia un candidato republicano que esté entre quienes se oponen sistemáticamente a las propuestas del actual presidente de los Estados Unidos.
