MINNEAPOLIS, MN
Una de las figuras más prominentes de la política en Minnesota en los últimos años, ha sido Michele Bachmann. Una figura que adquirió presencia a nivel nacional, y que sin duda dio muchísimo de qué hablar. Por ejemplo, durante la campaña presidencial del 2011, la representante republicana dijo:
“Ignoro qué tanto Dios tenga que hacer para llamar la atención de los políticos. Hemos sufrido de un terremoto; hemos sufrido de un huracán. Él ha dicho: ‘¿Van a escucharme por fin?’ Escuchen al pueblo americano, porque el pueblo americano está gritando hoy. Saben que el gobierno está en una mórbida dieta de obesidad y nosotros tenemos que reinar en los gastos.” Sugería entonces que los fenómenos naturales eran un mensaje de Dios en contra del presidente en campaña, Barack Obama. (Agosto 2011)
Una de las más notables voceras del Partido del Té (Tea Party), Bachmann logró amplia fama por frases como esa y otras igualmente desafortunadas, al grado que incluso algunos de sus iniciales seguidores decidieron dejar de serlo. Su estatura fue en muchas ocasiones comparada a la alcanzada tan fugazmente por Sarah Palin en la campaña del 2008. E, igualmente, su nombre ha sido señalado como posible aparición en las boletas electorales del 2016, ahora corriendo por la presidencia.
Eso será algo de futurología, pues por lo pronto, Bachmann se ha visto obligada a dejar su silla en el congreso, toca vez que Tom Emmer le remplazo en la candidatura republicana, y será él quien forme parte de la nueva mayoría en el gobierno federal. Emmer venció a Joe Perske (demócrata), y John Denney (independiente), por la representación del 6º distrito en el congreso federal en las pasadas elecciones del 2014.
Así, Michele Bachmann se despide, por lo pronto, de la política nacional, en la forma que sólo Bachmann podría hacerlo: con mucho ruido.
En diversos medios se ha publicado una lista de lo que, ha dicho la política republicana, extrañará una vez que deje su curul. Entre ellas está el fumar en cuartos llenos de humo; sus “amistosas” conversaciones con Nancy Pelosi (a quien criticó múltiples ocasiones y de forma nada amistosa); las noticias que reportaba sobre ella MSNBC (casi siempre, o siempre, en forma sarcástica). Son 16 las cosas que Bachmann extrañará de su paso por Washington, y que son en conjunto, una más de las múltiples ocasiones en las que la todavía representante minnesotana genera controversia, atrae atención, por parte de sus seguidores fieles, y de quienes le detestan.
“Vivo en el 6º [Distrito] y no puede importarme menos lo que Bachmann vaya a extrañar del congreso. Yo no le voy a extrañar,” expresó un lector de Star Tribune en línea como respuesta al recuento que el diario presento en pasados días.
Así, cuando Michele Bachman señala que extrañará el aparecer alrededor del presidente en turno, o bien los jueves Seersucker (de foto en blanco con otros miembros del congreso), o el saludar cara a cara a las celebridades que visitan el congreso, o a los solteros más codiciados de Washington, mucha gente expresa no tener interés en lo que haga o deje de hacer. Por su parte, la prensa nacional dedica atención a la “Reina del Partido del Té”, recordando sus más memorables momentos, como es el caso del Washington Post, o bien recontando las frases célebres que le dieron fama (New York Times).
Siendo representante de Minnesota, Bachmann tuvo siempre algo que decir en todo tema, incluido la reforma migratoria. Acusó a Obama de dar protección a inmigrantes analfabetos para convertirlos en votantes demócratas analfabetos, luego del anuncio de la acción ejecutiva. Previamente, viajó a la frontera sur para recoger los testimonios de los policías fronterizos en torno a cómo mejorar la seguridad de la frontera, sosteniendo que Minnesota no debería recibir ningún indocumentado, bajo ninguna circunstancia.
Algunos extrañarán legítimamente a Michele Bachmann; otros tratarán de olvidarla, muchos seguirán ignorándola. Con todo, un personaje que deja huella se retira de la política nacional… por lo pronto. Ciertamente, habrá que esperar a saber cual es el siguiente paso de este interesante personaje de la vida política en Minnesota.