MINNEAPOLIS, MN
Dirigentes demócratas y grupos de activistas criticaron la orden de un juez federal de suspender las nuevas solicitudes del programa Acción Diferida (DACA) y urgieron al Congreso a que dé un estatus migratorio estable a miles de jóvenes indocumentados que llegaron al país siendo niños.
Uno de los primeros en mostrar su apoyo a los llamados “soñadores” fue el gobernador de California, el demócrata Gavin Newsom, quien dijo que estos jóvenes representan “lo mejor” de lo que Estados Unidos es como “nación” y, por ello, el Congreso les debe ofrecer un nuevo sistema migratorio que abra para ellos “un camino claro hacia la ciudadanía”.
También de California es el senador federal Alex Padilla, quien esta semana se mostró confiado en el éxito de la táctica demócrata para intentar evitar el obstruccionismo e incorporar este mismo año el acceso a la ciudadanía para millones de inmigrantes, incluidos los “soñadores” en una ley presupuestaria general.
“Es más importante que nunca que el Congreso actúe para proteger a los soñadores y proporcionar un camino hacia la ciudadanía”, dijo en Twitter.
Padilla forma parte del Caucus Hispano del Congreso (CHC), que reúne a congresistas demócratas y que tras conocer el fallo del juez Andrew Hanen lamentaron que los “soñadores” han vivido en el “limbo durante demasiado tiempo” y sostuvieron que en el Capitolio se deben aprobar “protecciones permanentes” para estos jóvenes, que deberían tener acceso, en su opinión, a la ciudadanía.
Uno de sus integrantes del CHC, el representante por Texas Joaquín Castro, calificó de “terrible” la decisión del juez Hanen, del Tribunal de Distrito del Sur de Texas, que se puso del lado de un grupo de estados, liderados por Texas, que pidió el fin del programa bajo el argumento que fue creado ilegalmente por el ahora expresidente Barack Obama (2009-2017).
Hanen ordenó al Gobierno que deje de aprobar nuevas solicitudes de DACA, aunque sí le permite renovar las existentes al considerar que “no sería justo finalizar de repente un programa gubernamental que ha creado tan notable dependencia”, y que ésta ha podido aumentar con el paso de los años.
Un pedido similar al del CHC salió de la Alianza de Presidentes en Educación Superior e Inmigración, que incluye un centenar de presidentes de universidades de toda la nación, que consideraron que el fallo de Hanen es un recordatorio de la “necesidad urgente” de una legislación que proteja de la deportación y de manera permanente a los “soñadores”, tal y como hace DACA.
Por su parte el grupo latino Coalición por los Derechos Humanos de los Inmigrantes de Los Ángeles (CHIRLA) apostó por la fórmula que han elegido esta semana los demócratas llamada “reconciliación”, que permitiría una mayoría simple para aprobar la vía a la ciudadanía para amparados por DACA, el Estatus de Protección Temporal (TPS) y trabajadores indocumentados considerados “esenciales”.
Por la vía ordinaria serían necesarios al menos 10 votos republicanos en el Senado para aprobar los diferentes proyectos de ley que abrirían una vía a la ciudadanía a millones de inmigrantes, pero existen serias dudas de que se pueda recabar ese número y evitar así el previsible bloqueo a estas medidas en la Cámara Alta.
Todd Schulte, presidente de otro grupo de presión, en este caso el formado por grandes empresas tecnológicas, FWD.us, dijo que el fallo es “profundamente decepcionante” pues DACA ha transformado “cientos de miles de vidas”, e instó al Congreso a actuar de “inmediato” para encontrar una salida migratoria estable para estos jóvenes.
“Hoy lo deja absolutamente claro: solo una solución legislativa permanente aprobada por el Congreso eliminará el miedo y la incertidumbre con los que los beneficiarios de DACA se han visto obligados a vivir durante años”, dijo.