MINNEAPOLIS, MN
El Departamento de Policía de Minneapolis ha arrestado a más de una docena de sospechosos involucrados en una red de delitos que se centró en robar teléfonos celulares de personas intoxicadas y luego golpear a las víctimas.
Según un informe proporcionado por el portavoz de la policía de Minneapolis, un barrido de tres días realizado hace dos semanas terminó con la detención de 16 personas entre las edades de 13 y 25 años. Los sospechosos son vistos en video de vigilancia golpeando, pateando y atropellando a un hombre con una bicicleta
Los robos ocurrieron cerca de las avenidas Hennepin, Primera y Segunda, entre las calles Tercera y Sexta, y ocurrieron entre las 10 p.m. y las 3 a.m.
Los sospechosos eran en su mayoría niños y hombres, con una mujer a veces presente. Ellos “multarían” a la víctima, buscando un blanco fácil, como alguien intoxicado y solo, mirando su teléfono celular a veces. Elder dijo que la mitad de los agresores son menores.
Uno de los incidentes ocurrió el 3 de agosto cerca de Target Field.
Según la denuncia penal, las imágenes muestran aproximadamente 12 hombres que intentan quitarle el teléfono celular a una víctima masculina, golpeándolo brutalmente. Los sospechosos son vistos arrancando los zapatos y pantalones de la víctima y luego revisando sus bolsillos. Se observa que la víctima recibe puñetazos y patadas en la cabeza varias veces durante el altercado. En un momento, la denuncia indica que la víctima es arrojada al suelo, queda inmóvil, y luego salta repetidamente, golpea con macetas y es montada en una bicicleta. Una vez que llega la policía, la víctima y todos los sospechosos involucrados se van.
Luego, el 6 de septiembre, después de una investigación adicional, los oficiales reconocieron a uno de los asaltantes del video y lo arrestaron. Lo identifican como Boris Likuwa Lusumbo, 20. El video muestra a Lusumbo corriendo hacia la víctima junto con otros atacantes después de que la víctima fue golpeada por otro atacante.
Fue visto recogiendo algo del suelo que la víctima dejó caer y se fue con él. Lusumbo admitió que era él en el video a la policía. Ha sido acusado de robo con agravantes de primer grado y enfrenta hasta 20 años de prisión por el crimen, si es declarado culpable.